
Adiós triste a dos higueras
Recientemente nos encontramos con esta preciosa composición poética de Sebastián Pérez Simón, quien la hiciera pública en la Revista Enguera de 1958.
Por nuestra parte, encantados de hacerla extensiva a nuestros seguidores, jóvenes los más y mayores que, posiblemente, no la recuerden y…, si la recuerdan, seguro que disfrutarán con el reencuentro
Madrit
Decíamos en 1979 al presentar el Documento que traíamos dos documentos inéditos del gran Pepe Ciges, ambos fechados en 1949. El primero es una carta (Madrit_PpCiges) de una extraordinaria riqueza que, bajo la figura literaria de carta personal, nos le presenta como lo que siempre fuera: un gran enguerino con una inmensa personalidad que le adornaba y su pueblo supo reconocer.
Que lo disfruten, así como los restos del antiguo puente para ir al Cementerio. ¿Sabrían decir dónde estaba?
Las fiestas de 1949
En la presentación del nº 12, y dentro de la sección “enguerino”, se dejaba escrito: traemos dos documentos inéditos del gran Pepe Ciges, ambos fechados en 1949. El primero es una carta (Madrit_PpCiges) de una extraordinaria riqueza que, bajo la figura literaria de carta personal, nos le presenta como lo que siempre fuera: un gran enguerino con una inmensa personalidad que le adornaba y su pueblo supo reconocer.

Sobremesa de San Antón
A veces escribir es más doloroso de lo que parece. Bueno, escribir y muchas otras cosas, pero…
Cuando se quiere, se entiende. Cuando no se quiere, se apela a que el autor lo hace por donde le escuece.
Felices fiestas de San Antón a todos
Miedo
Y con este completamos la primera serie de Cuentos con moraleja para sus nietos que compuso Doña Carmen Aparicio… Y decimos bien: con morleja, que en el relato actual es bien novedoso…
Lean y comprobarán cómo la abuela les dice a los nietos que hay que lanzarse a la vida, que no hay que tener miedo a las puertas cerrada… ¿les extraña? A nosotros: no. Es más, entendemos que es la mejor educación para la vida.
Gracias, Maestra
El campiñero y el macho
Y vamos por el tercero de los Cuentos que nos hizo llegar Dª. Carmen Aparicio. Se trata del cuento El campiñero y el macho con una gran moraleja, especialmente para aquellos niños que, sin ser autistas, se empeñan en meterse en el hoyo de la vida; pero también para los padres de esos mismos adolescentes.

6ª y última Carta de Miguelico
En fin, que todo lo bueno se acaba… hasta las Cartas de Miguelico… ¡en nuestra parla!
Y fue una pena: ya no volveremos a leer aquello de manero ni cómo, por el desuso, había quedado la mesa del Repeso. Y claro, aquellos lodos trajeron estos lodos. Se acabaron las prosesiones y, lo que es peor, ni el ayuntamiento ni el comercio han vuelto a levantar cabeza en la capital del distrito.

La casa de los mil espejos
Carmen Aparicio no trae otro nuevo relato en formato cuento: La casa de los mil espejos. Bien cortico, pero con una moraleja bien clarica; tan clarica que la podemos resumir con el viejo refrán que decía: todo es del color del cristal con que se mira

El laurel
En nuestro afán por las cosicas de la sierra solicitamos, en su día, unos escritos –conocedores que existían– a su autora: D.ª Carmen Aparicio.
Cuando los tuvo arreplegaus, nos los va dar. ¡Muchas gracias!, le dijimos; y puestos y bien mandaus, recurrimos a quien sabe hacerlo para que remirara aquel material.

5ª Carta de Miguelico
Muy Sr. mio: M’ alegraré qu’ al recibo d’ estas cortas letras s’ encuentre rebentando de salud, la misma que pa mi deseo por los siglos de los siglos, amen.
Ya habrá notao los pogresos que yo ha hecho en oltogafría...
Si así inicia hoy su carta, ¡imaginen cuál puede ser el final!
